Este 14 de mayo se llevó a cabo el festival de cerveza más importante de América Latina, el BeerFest. El lugar de encuentro fue en Jardines de México. Y aquí te voy a contar qué fue lo que vivimos.
Un inminente calor, característico de Jojutla, pero un ambiente que contagiaba felicidad. Desde que llegamos todo estuvo muy organizado, había un mar de gente disfrutando de este fin semana.
Los stands de cerveza y comida no decepcionaron, con gran variedad, no sabíamos ni qué elegir. Al final compramos un burrito y una cerveza para calmar un poco el calor, nos sentamos en el pasto, debajo de un árbol y disfrutamos sin problema de lo que habíamos comprado.
Mientras estábamos ahí, vimos pasar a la gente con diferentes outfits, representativos de este tipo de festivales, sacando las mejores poses para las fotos y los spots de selfies estaban muy creativos.
Después decidimos recorrer (o tratar de recorrer porque estaba enorme) todo lo que había, porque entre comida, juegos, bandas tocando, no sabías qué camino tomar. Primero estaban los juegos, vimos a dos chicas morirse de la risa en una esfera gigante de plástico, donde trataban de correr como unos hamsters; del otro lado vimos dos chicos jugar luchas como verdaderos gladiadores; y más al fondo estaba una chica en el famoso toro mecánico, en donde la fila era larga porque todos querían participar.
Detrás de todos los juegos se alzaba una enorme carpa de colores cálidos, donde una banda tocaba un rock que te erizaba la piel, la gente bailaba y cantaba.
Quiero destacar que en ningún momento mi compañera y yo nos sentimos inseguras en el lugar, siempre vimos un ambiente de respeto.
Ya casi a las 8 de la noche nos acercamos a nuestros lugares para poder presenciar a los dos grandes del evento: Inspector y Panteón Rococó.
El lugar a reventar, grupos de amigos y risas me hicieron recordar que ya llevamos dos años de pandemia y este es el momento donde “regresamos a la normalidad”.
Justo a la hora, Inspector abrió con esa voz que caracteriza a Big Javi, y todos entonaron sus canciones. “Y qué”, “Amargo Adiós” y “Amnesia” eran las más esperadas. Seguido de ellos, entró Panteón Rococó que entre ska y unas cumbias nos hicieron bailar a todos los que estábamos presentes. El show terminó a las 12:00 am y aunque nuestros pies ya dolían por la bailada que nos echamos, no quisimos dejar de presenciar el “after” a cargo de Platanito Show. Y es que no solo es buen comediante, también es un excelente DJ.
Con esto terminamos este gran festival. Vimos a la gente feliz, gritando, cantando, brincando, bailando. BeerFest la volvió a romper, ¿qué nos traerá para el 2023?
