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Son FALSOS los desmayos por ‘repentinitis’ vinculados a la vacuna contra COVID-19

Usuarios de redes sociales definen repentinitis, como un efecto secundario de las vacunas, pero eso es falso.

Desmayos repentinos han circulado en redes sociales adjudicándolos a efectos secundarios por la vacuna contra el coronavirus o lo que han llamado como repentintis.

Vídeos de personas desmayándose repentinamente han circulado en redes sociales, causando alarma y desinformación entre las personas, debido a que los desmayos son presentados como causa de un efecto secundario por la vacuna contra el coronavirus, causada por una enfermedad que no existe a la que popularmente han llamado como repentintis.

Repentintis es un término que los internautas están utilizando para atribuir falsamente a la aplicación de vacunas contra coronavirus, los desmayos repentinos de los que han sido víctimas, periodistas, deportistas, políticos y personas en general-

En resumen, definen falsamente la repentintis como desmayo o muerte instantánea a causa de los efectos secundarios de las vacunas contra el coronavirus a nivel mundial.

El caso del periodista Carlos Ferrara de Paraguay, que se desmayó en vivo mientras cubría un reportaje de COVID-19, fue publicado en redes sociales como muerte por repentinitis a causa de la vacuna contra coronavirus, lo cual fue desmentido por los médicos, que informaron que el desmayo había sido causado por un golpe de calor, presión alta y diabetes y el periodista se encontraba estable.

Periodista se desmaya en vivo a casa de golpe de calor

Cada que ha sucedido un desmayo o muerte inesperada de una figura pública, usuarios de redes sociales aseguran que es debido a las vacunas que causan efectos secundarios como la miocarditis y la pericarditis

El médico Fernando Moraga-Llop, vicepresidente de la Asociación Española de Vacunología, explica que las fichas técnicas de las vacunas especifican que uno de sus efectos secundarios son la pericarditis y la miocarditis sin embargo no se han registrado muertes o desmayos por estas enfermedades a causa de la aplicación de la vacuna.

La repentinitis no es un término médico, no existe como enfermedad y el término es usado de manera incorrecta para asociarlo con efectos secundarios de la vacuna contra el coronavirus