Muy pocos países han logrado sobrellevar la pandemia por COVID-19, y uno de ellos es Costa Rica.
Hasta el momento, Costa Rica presenta la tasa de mortalidad más baja de América (0,81%), y la mayoría de su ciudadanía se ha recuperado.
Y aunque ha mantenido buenos números, las autoridades de dicho país no bajan la guardia e insisten en mantener las medidas higiénicas.
Dentro de sus claves del éxito en la contingencia está su sistema de salud, ya que Costa Rica cuenta con uno de los mejores sistemas de salud a nivel mundial.
Este sistema garantiza que cada uno de los ciudadanos tenga acceso gratuito a las pruebas del COVID-19.
Otra clave fue sus acciones oportunas y a tiempo ante la contingencia, ya que desde el primer momento, el país cerró fronteras para los extranjeros, lo cual deriva una caía estimada del 27% para el 2020.
Asimismo, la ciudadanía costarricense ha colaborado a que salgan más rápido de la situación, ya que si bien no establecieron una cuarentena generalizada, se ordenó restringir la circulación de vehículos, el cierre de bares, cines, gimnasios y antros.
Además, la ciencia del Instituto Clodomiro Picado de la Universidad de Costa Rica, con mas de 50 años en experiencia creando antivenenos de serpientes, ya trabaja aplicando su técnica para desarrollar un suero que trate a los pacientes graves de COVID-19.
