Tras morder una pila, un niño de 5 años de edad, terminó con parálisis cerebral, ahora, su familia solicita aportaciones económicas y en especie.
Una familia originaria de Torreón, Coahuila, se encuentra buscando apoyo económico y en especie para su hijo de cinco años, quien sufre de parálisis cerebral después de que mordió una pila.
El diagnóstico de parálisis cerebral espástica cuadriplégica, del que sufre Iker Fuentes se hizo una semana antes de su graduación.
De acuerdo con la madre del menor, Iker ingresó por su propio pie al hospital y parecía que todo estaba bien, sin embargo, su condición fue empeorando y con el paso de los días fue perdiendo su capacidad para caminar y moverse libremente.
Por la situación, el menor tuvo que ser sometido a una cirugía de alto riesgo, que le causó hidrocefalia.
Los padres de Iker informaron que el pequeño se podrá recuperar con terapias visuales, físicas y de lenguaje, sin embargo, no cuentan con la solvencia económica para costearlas.
