Al menos 25 tumbas fueron destruidas por la caída de árboles en el panteón de La Leona de Cuernavaca; algunas de las criptas datan de más de cien años.
Durante la temporada de lluvias dos árboles colapsaron en ese cementerio y cayeron sobre varias tumbas en dos diferentes puntos.
La destrucción más crítica fue la que ocurrió en el lado norte en donde el árbol derribó una tumba de gran construcción que data de más de cien años.
La tumba prácticamente se partió en dos y en otras más se rompieron las lápidas, por lo que la zona fue acordonada.
El encargado del panteón, Juan Rodríguez Ramírez, afirmó que ya solicitó una reunión con las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para saber qué podría hacerse con algunas de las criptas.
“La verdad todavía no sabemos qué cosa es lo que vaya a proceder pero pues son tumbas muy antiguas de hace más de cien años, del otro lado (donde también se destruyeron) fueron ocho o siete, aquí (en el lado norte) fue donde ocurrió la mayor destrucción”.
-Xavier Omaña-