Durante su Homilía dominical desde la Catedral de Cuernavaca, el Obispo Ramón Castro y Castro exhortó a los creyentes a que tengan cuidado de a quien dejan entrar en su vida, de que no se dejen engañar, por lo que en entrevista al termino de la Misa dominical en la Catedral de Cuernavaca, aclaró que esto aplica para todos
“El pueblo de hoy está desilusionado de tanta palabra que se promete, de tantas promesas que se dan y sin embargo nos engañan, nos dicen mentiras y se olvidan”, manifestó Castro y Castro, quien precisó que esto no sólo aplica a los políticos “también están incluidos, pero todos nosotros cuántas veces prometemos cosas y no cumplimos, padres a hijos o hermanos entre hermanos”.
Al cuestionarlo sobre el segundo informe de labores del gobernador del Estado, Graco Ramírez, refirió que no tenía el gusto de haberlo escuchado, pero precisó: “Yo creo que hace su mejor esfuerzo, ojalá que siga adelante sobre todo en aquellas partes que todavía necesitan ser atendidas en cuestión de inseguridad y violencia. Sé que se ha hecho, bendito sea el Señor bastante, pero todavía queda mucho por hacer”.
Respecto al mensaje evangélico del día, explicó que fue sobre el demonio, cuya existencia no se debe evadir. “Porque el gran éxito que tiene el demonio es hacer creer que no existe y eso hace que tantas personas se dejen llevar cuando le abren un poquito la ventana de su corazón, entra y lo ocupa”.
“¿Cómo distinguir cuando nos dejamos llevar sistemáticamente por la mentira, por el engaño? cuando nos dejamos llevar por los vicios, por todo aquello que hace mal a las personas, ahí hay presencia del mal, cuando no queremos distinguir la frontera entre el bien y el mal y al mal lo llamamos bien; esto nos debe hacer pensar,” finalizó.
